El Programa Colombia comenzó actividades en el año 2002 brindando asistencia humanitaria en emergencias y fue registrado como programa de país en 2006. Tiene como misión acompañar y fortalecer a las comunidades colombianas vulnerables, afectada por el conflicto armado, por violaciones a los derechos humanos y por desastres de origen natural, mediante un trabajo inspirado en la diaconía cristiana y con base en el imperativo humanitario. Su visión es la de comunidades que se empoderan para enfrentar y disminuir su situación de vulnerabilidad.
La Federación Luterana Mundial- FLM trabaja en Colombia, debido a su doble mandato, desde un enfoque basado en derechos humanos y asistencia humanitaria, con una mirada territorial, en los departamentos de Arauca, Chocó, Guaviare y en Venezuela. Su trabajo se fundamenta en fortalecer, apoyar y acompañar los procesos de las propias comunidades, construir capacidades y visibilizar sus iniciativas.
La estrategia del programa Colombia para los próximos seis años “Vida digna, paz y territorio”, se alinea a la Estrategia de Servicio Mundial: “Por una Esperanza y un Futuro”.
Esta adopta los lineamientos estratégicos, y los adapta a la realidad nacional:
Áreas estratégicas:
- Medios de Vida y Justicia Climática:
Medios de Vida: Promoción de modelos producción agroecológica amigable y sostenible con el medio ambiente; Incidencia local, nacional e internacional en medios de vida, desarrollo rural integral y gestión del territorio (DESCA).
Justicia climática: Derechos Humanos y empresas; Fortalecimiento organizativo.
- Servicios Humanitarios de Calidad
Protección en emergencias y fortalecimiento de la resiliencia comunitaria: incluido la prevención y respuesta a violencia basada en género, apoyo psicosocial basado en la comunidad y la Educación en el Riesgo de Minas (ERM).
Seguridad alimentaria, nutrición y medios de subsistencia: incluidos artículos no alimentarios, e intervenciones en efectivo.
WASH: Acceso a agua y hábitos saludables.
- Protección y Cohesión Social
Protección: Fortalecimiento comunitario de los procesos organizativos y los mecanismos de protección y autoprotección, la gobernanza y la educación sobre riesgos de minas (ERM); mecanismos de exigibilidad de derechos, con énfasis en los derechos de las víctimas.
Justicia de Género – Igualdad de Acceso a derechos y oportunidades: Sensibilización y formación; Promoción de liderazgos femeninos; y documentación de los casos.
Convivencia pacífica: transformación de conflictos y consolidación de la paz.
Gestión del riesgo: Múltiple afectación; Enfoque diferencial (étnico); Alianzas multinivel; fortalecimiento de las organizaciones locales; y seguimiento a la implementación del marco de Sendai en el país.
Incidencia desde lo local a lo global
Trabajamos directamente con las comunidades y sus organizaciones fortaleciendo sus capacidades, para que su voz sea lo que se levante desde el nivel local hasta el global. Esto incluye espacios de promoción en Nueva York y Ginebra (con el estatus consultivo ECOSOC de FLM) y en Washington D.C. También apoyamos plataformas, redes y socios que pueden promover prioridades de promoción a nivel nacional.
Nuestros énfasis en incidencia: Defensa del territorio; Justicia de género; Cumplimiento del Acuerdo de paz y una salida negociada del conflicto; y protección de los derechos humanos.
Programa Colombia
El Programa Colombia comenzó actividades en el año 2002 brindando asistencia humanitaria en emergencias y fue registrado como programa de país en 2006. Tiene como misión acompañar y fortalecer a la población colombiana vulnerable afectada por el conflicto armado, por violaciones a los derechos humanos y por desastres de origen natural, mediante un trabajo inspirado en la diaconía cristiana y con base en el imperativo humanitario. Su visión es la de una población que se empodera para enfrentar y disminuir su situación de vulnerabilidad.
La Federación Luterana Mundial- FLM trabaja en Colombia, debido a su doble mandato, desde un enfoque basado en derechos humanos y asistencia humanitaria, con una mirada territorial, en los departamentos de Arauca y Chocó. Su trabajo se fundamenta en fortalecer, apoyar y acompañar los procesos de las propias comunidades, construir capacidades y visibilizar sus iniciativas.
El empoderamiento de las comunidades y las organizaciones de base ha enraizado a la FLM en los contextos locales colombianos. La Federación crea puentes a nivel local, nacional e internacional entre diferentes actores de la sociedad civil, autoridades institucionales y comunidad internacional, y aboga por cambios que generen un impacto positivo a nivel local. Como organización internacional, la FLM tiene la obligación y la oportunidad de hacer más visibles a las comunidades empobrecidas y transmitir sus mensajes en escenarios internacionales, conectando así diferentes actores de lo local a lo global.
Nuestros valores
- Dignidad y Justicia
Respetamos la dignidad de todas las personas, a la vez que empoderamos y apoyamos a las comunidades vulnerables en sus esfuerzos por alcanzar justicia, respeto a los derechos humanos y un futuro sostenible. Enfrentamos las causas subyacentes a la pobreza y la exclusión y trabajamos por una distribución más equitativa del poder, los recursos y las oportunidades
- Compasión y compromiso
El Departamento para Servicio Mundial cuida y muestra compasión por quienes sufren. Al mismo tiempo, está comprometido con un alto nivel de profesionalismo en la gestión e implementación del Programa Colombia
- Respeto por la diversidad
Respetamos la diversidad al interior de las comunidades con las que trabajamos y entre nuestra fuerza de trabajo
- Inclusión y participación
El Programa Colombia está comprometido con la inclusión y la facilitación de la participación completamente equitativa de hombres y mujeres, personas de todas las edades o en condición de discapacidad, en todas sus actividades, programas y procesos de toma de decisiones, así como en la sociedad en general
- Transparencia y rendición de cuentas
El Programa Colombia está fuertemente comprometido con la transparencia en todas sus actividades, objetivos, motivaciones, programas, decisiones financieras y resultados. Procuramos que haya un equilibrio en la rendición de cuentas para con las poblaciones afectadas, socios y donantes
Nos relacionamos con las comunidades de manera que podamos empoderarlas e involucrarlas en su propio desarrollo.
Fomentamos la participación comunitaria y apoyamos el desarrollo de redes y estructuras locales, para fortalecer a la sociedad civil local
El concepto de “territorio” es esencial para la planeación estratégica del Programa Colombia. Es en los territorios donde las comunidades conviven con las causas y consecuencias del conflicto armado interno y es allí, también, donde se construirá la paz. Superar la pobreza y el abandono del Estado, así como las inequidades de género, origen étnico y edad, requieren una respuesta integral y decidida, negociada entre autoridades y comunidades