Organizaciones de la sociedad civil internacional rechazan los reiterados ataques y señalamientos contra la Comisión de la Verdad
Organizaciones de la sociedad civil internacional rechazan los reiterados ataques y señalamientos contra la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad -CEV e invitan a rodear y proteger su trabajo
Para las Organizaciones de la sociedad civil internacional que suscribimos el presente comunicado resultan inadmisibles los señalamientos de los que han venido siendo objeto los comisionados y comisionadas de la CEV, y de manera particular su presidente el padre Francisco de Roux S.J., por parte de miembros del partido de Gobierno y de un exministro de Defensa y exembajador, quienes, desde su oposición al Acuerdo Final de Paz, insisten en descalificar el juicioso y responsable trabajo que viene realizando la Comisión como uno de los componentes del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No repetición, de carácter temporal y extrajudicial.
Desde su constitución en el año 2017, la CEV ha venido desarrollando un ejercicio independiente y riguroso por revelar la verdad del dolor profundo producido por el largo conflicto armado que ha padecido Colombia.
Desde el lugar de las víctimas va tejiendo caminos, construyendo metodologías, habilitando espacios, generando diálogos, recibiendo informes y testimonios a lo largo y ancho del país y en el exterior, para esclarecer la verdad contribuyendo de esta forma a la terminación del conflicto armado en Colombia.
Estamos convencidas que solamente la Verdad es la garantía para la no continuidad y la no repetición del conflicto armado en Colombia. Las comisionados y comisionadas de paz han demostrado su compromiso con este propósito y desde la diversidad y la diferencia han asumido con hondura y dedicación su labor. Su honorabilidad es y será la garantía que preservará dicha verdad en favor de la paz de Colombia.
Animamos a que la Comisión continúe ejerciendo su labor y esperamos los frutos de su ejercicio con esperanza. Alentamos a todos los ciudadanos y ciudadanas del país, y del exterior independiente de su orilla ideológica, a aunar esfuerzos para no dejar que este proceso sea maltratado, ideologizado ni politizado por los intereses de unos pocos que se rehúsan a la fuerza transformadora de la verdad.
¡La verdad es un bien público!
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