Comunicado a la opinión pública sobre la situación humanitaria en comunidades indígenas, campesinas y afrodescendientes de los municipios de FRONTINO Y DABEIBA, Antioquia

FLM

 

Bogotá, Septiembre 20 de 2021. La Iglesia Evangélica Luterana de Colombia, con su trabajo en área rural en los municipios de Frontino y Dabeiba del departamento de Antioquia y miembro de la coordinación de la red de Solidaridad Interreligiosa en Zonas de Conflicto en Colombia - SIZOCC, la Federación Luterana Mundial, Programa Colombia y la Misión Evangélica Luterana de Finlandia,  como acompañantes, hicieron parte de la Misión Humanitaria entre el 29 de agosto y 3 de septiembre en la  vereda Nutria – Tascón (Dabeiba) y el corregimiento de La Blanquita-Murrí (Frontino).  Dicha Misión se desarrolló junto a las Misioneras de la Madre Laura, la Arquidiócesis de Santa Fe de Antioquia y Medellín, las Diócesis de Apartadó, Quibdó, Istmina-Tadó y Santa Rosa de Osos, las Hermanas Franciscanas de Nuestra Señora de Lourdes, Religiosos Claretianos, la Iglesia Presbiteriana,así como también la Organización Indígena de Antioquia y organizaciones defensoras de los derechos humanos nacionales e internacionales. 

 

En dicha misión se pudo constatar, además de la falta de presencia estatal, la grave situación humanitaria de las y los habitantes de la región, ante los recurrentes hechos que vulneran los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario debido a la instalación de minas antipersonales, así mismo el reclutamiento forzado a menores de edad y jóvenes, amenazas a líderes y comunidades, asesinatos selectivos y desplazamiento forzado por parte de los grupos armados ilegales que operan en la región.

 

En el último año, La Misión Evangélica Luterana de Finlandia y la Federación Luterana Mundial en Colombia, a través de la Iglesia Evangélica Luterana de Colombia presente en el territorio, viene dando seguimiento junto con otras iglesias, a la situación de violencia sostenida y de vulneración de derechos que se vive en la zona.

 

Fruto de estos esfuerzos de acompañamiento y de las denuncias recurrentes de las organizaciones y comunidades de la zona sobre las violaciones de derechos humanos actuales y de los posibles riesgos , como Federación Luterana Mundial en Colombia, Misión Evngelica Luterana de Finlandia e Iglesia Evangélica Luterana de Colombia, nos permitimos llamar al Gobierno Nacional a:

 

  • Garantizar no solo la protección sino el acceso efectivo a servicios básicos y el respeto de los Derechos Humanos de las comunidades indígenas, campesinas y afrodescendientes de población, con presencia estatal civil.
  • Garantizar la vida, la integridad y la autonomía de los pueblos étnicos, los líderes y lideresas en Dabeiba y Frontino, quienes son objeto de diferentes amenazas por los actores armados que se disputan el control territorial. Y quienes además corren un riesgo constante por su labor de denuncia y defensa de los territorios.

 

Insistimos en que la sistematicidad del conflicto que se vive en este territorio, como en otros del país, debe ser tratada con respuestas estructurales e integrales que vayan en sintonía con los planes de vida comunitarios basados en la construcción de la paz y la vida en dignidad.

 

Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos; bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación; bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad; bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados; bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia; bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios; bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios; bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos; bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo; gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.

Mateo 5: 3-12